Esta es una de las preguntas que más me suelen hacer mis lectores y alumnos diseñadores.
¿Debería poner los precios de mis servicios de diseño en mi web?
Sí.
Yo soy partidaria de mostrar tus precios en la web, o al menos un «desde x precio». Ahora te lo explicaré más en detalle.
Antes de eso quiero analizar los frenos que veo que tienen muchos diseñadores freelance a la hora de publicar sus precios en la web.
Por lo que he vivido yo misma y por lo que me cuentan mis lectores y colegas del sector la cosa suele estar en alguno de estos argumentos:
«No estoy seguros de si mis precios son adecuados o directamente no sé cuánto cobrar»
Es decir, no tienes un precio mínimo desde el que parten tus servicios porque aceptas cualquier encargo por pequeño que sea y presupuestas a medida.
Me encuentro con demasiados diseñadores que presupuestan a medida sin una base desde la que partir, inventando servicios para cada cliente nuevo que les llega y después se dan cuenta de que han trabajado mucho más de lo esperado y el proyecto no ha sido rentable.
¿A ti también te pasa esto? Yo también pasé por esa fase, es parte del proceso.
Si estás en esta situación, deberías empezar a plantearte la estandarización y creación de tu servicio principal y la fijación de una estrategia de precios de una vez por todas.
«La competencia me va a copiar o van a hablar mal de mi»
Creo que no hay que obsesionarse con la competencia. De hecho, creo que la competencia es sana y nos ayuda a crear colaboraciones y a estar en mejora continua para diferenciarnos y no quedarnos atrás.
Además, si quieren saber tus precios quizás te llegue por ahí alguna petición de «presupuesto fantasma» de algún colega suyo para ver cómo lo haces. Y si quieren copiarte, lo van a hacer…
Después cada uno cae por su propio peso. Será difícil que alguien pueda igualar tu servicio, tu estilo, tu carácter, tu posicionamiento o visibilidad en el mercado… Pero para eso tendrás que tener muy clara cuál es tu propuesta de valor.
Pero si te sientes amenazado piensa que nunca vas a tener control sobre lo que hagan los demás, pero sí sobre lo que haces tú en tu negocio.
Céntrate en tus clientes, no en tu competencia y sigue mejorando la experiencia que tienen trabajando contigo y sigue solucionando sus problemas.
Vamos a darle la vuelta a esto. En nuestro sector hay muy pocos profesionales que tienen desarrollados sus servicios en detalle en su web y muchos menos son los que indican sus precios.
Los clientes quieren tener el máximo de detalles de antemano posibles para poder tomar una decisión de compra responsable.
Antes de ponerse en contacto contigo seguramente habrá analizado en profundidad quién eres y lo que ofreces. Si no indicas tus precios en tu web, quizás también estés perdiendo la ocasión de iniciar este proceso y que el posible cliente elija empezar esa conversación directamente con tus competidores que sí indican toda la información en su web.
«Tengo miedo a publicar mis precios porque ahuyentaré a posibles clientes»
Hablar de dinero no es fácil. Y muchas veces tenemos miedo a parecer caros (en este artículo hablé en su día sobre esto mismo). Pero es más difícil todavía hablar de «money» si el cliente potencial no tiene una referencia o un precio desde el que comenzar a conversar.
No lo niegues, tarde o temprano vas a tener que hablar de dinero…
Así que es mucho mejor que los clientes que te pidan presupuesto estén ya precualificados y dispuestos a invertir lo que vales.
Y ten muy en cuenta que tus precios posicionan tu marca en el mercado y atraen a un tipo de cliente concreto.
¿Quieres parecer un diseñador low cost del montón y trabajar con clientes tóxicos que no te valoran por tu trabajo sino que te eligen por tu precio bajo o quieres que se te perciba como un profesional con servicios de calidad que cobra lo que sus servicios valen?
Yo sinceramente prefiero que digan de mi «No es barata pero es la que mejor te va a ayudar con ese problema».
En la mayoría de los casos me encuentro con diseñadores que ofrecen unos servicios premium inmejorables con precios de risa y que están perdiendo dinero por todos los lados porque no saben cómo conseguir clientes que paguen lo que realmente valen sus servicios. Tener una estrategia de marketing desarrollada para conseguir clientes que valoran tu trabajo es responsabilidad tuya y no puedes pretender subir los precios y quedarte sentado esperando…
No basta con crear una página de servicios genérica en tu web y poner unos precios. Si quieres acortar el ciclo de venta hay más factores que entran en juego. Tienes que tener una web completa con toda la información necesaria para mostrar el valor de tu trabajo y que tus clientes potenciales confíen en ti.
Y no solo eso, es necesario que desarrolles en detalle cada servicio en una página independiente de tu web explicandoa tu cliente en profundidad con un buen copy cuáles son los beneficios que aporta trabajar contigo, en qué consiste el servicio, qué incluye, qué no incluye, cómo es el proceso de trabajo, el proceso de pago, preguntas frecuentes, testimonios etc.
Entonces ¿pongo mis precios públicamente o no?
Sí, por supuesto. Y te explico cuándo y por qué:
- Quieres filtrar el tipo de cliente y quitarte de encima cuanto antes a los que no tienen suficiente presupuesto y que buscan el low cost.
- Quieres ser transparente y claro desde el principio. No quieres sorpresas ni tus clientes tampoco.
- Quieres demostrar tu profesionalidad y que tienes unos servicios creados y una estrategia de precios definida.
- Vendes servicios a precio fijo con una página de venta en detalle y botón de compra directo sin apenas interacción.
- Vendes servicios productizados con un precio del que parten e incluso ofreces diferentes paquetes de precios con diferentes características.
¿Quién no pone precios?
- El que está en una fase en la que no sabe cuánto cobrar o incluso trabaja por horas. NO publiques tu tarifa/hora en tu web. Ese debería ser un dato interno. Trabaja siempre por proyecto, no por el coste de tu tiempo.
- El que no tienes un precio fijo porque tus precios dependen del tipo de cliente. Yo te diría que tengas siempre un precio mínimo del que no bajan tus servicios y que ese dato aparezca en tu web. Aun así, recomiendo tener foco en la estrategia y definir a un cliente ideal al que solucionar su problema principal y en base a eso desarrolles un servicio con un precio acorde al tipo de cliente.
- Sientes que necesitas hablar con tus clientes potenciales para mostrar tu valor antes de dar precios. Pero te digo que para mostrar tu valor y rebajar objeciones están tu web, tus textos, tu propuesta de valor, tu posicionamiento en el mercado, tus páginas de venta, tu newsletter, tu blog… Y eso no lo tienes que dejar de lado. A la gente le da miedo pedir presupuestos si no saben en qué rangos de precio se mueve el profesional.
- No quieres perder ninguna oportunidad y prefieres que entren todo tipo de peticiones y en todo caso después filtrar y decir tú que no. Esto suele ser habitual cuando se comienza y no se tienen suficientes peticiones de presupuesto o se está tanteando el mercado para ver qué tipo de perfiles estás atrayendo. Pero la realidad es que te llegarán gente con presupuesto muy bajo.
¿Tú tienes tus precios publicados en tu web? ¿Prefieres no ponerlos? ¿Por qué? Comenta aquí abajo tus preferencias, motivos y sugerencias.
Me encantará leer los pros y los contras de todo lo que he comentado por aquí y así enriquecer el artículo.